A la hora de abordar los consejos básicos en un proyecto de construcción de una nave industrial hay que tener en cuenta una serie de cosas que vamos a ver en este artículo.
Hay que tener en cuenta que comprar o alquilar una nave industrial es la alternativa más común en muchas de las empresas, pero existen otras que gustan de adquirir un terreno o suelo industrial para la construcción de una nave que pueda responder de forma exacta a tus necesidades. Existen una serie de razones como nos comentan desde los especialistas de ingenierosdurhi.es para elegir esta alternativa, esto depende de los requerimientos que necesite cada empresa.
Este tipo de requisitos pueden no estar entre las que ya están construidas, pues puede haber escasez en la falta de oferta de la nave industrial de nueva construcción o que estén en óptimas condiciones. Puede existir la voluntad de que se desarrolle un proyecto a medio y largo plazo de manera flexible y escalada a lo largo del tiempo.
Con frecuencia la empresa suele adquirir el terreno, desarrollando la construcción en distintas fases, con lo que se pueden adaptar las instalaciones a los requerimientos futuros y donde a la vez se hace la inversión de manera progresiva.
En cuanto la empresa opte por comprar un terreno, se puede construir la clase de nave que sea necesaria, debiendo pensar en una serie de factores.
La situación del terreno
La propia ubicación del terreno se determina por el precio por metro cuadrado, el cual puede llegar a variar de forma significativa, en las zonas próximas a Barcelona o área metropolitana con respecto a las coronas que se encuentren más alejadas. Por lo general, las ubicaciones que se encuentran menos masificadas y que están alejadas de la capital, suelen tener unos precios más baratos, encontrándose a la vez más disponibilidad en cuanto al terreno.
Pensemos también en las comunicaciones y vías de transporte que precisa la clase de actividad que tiene la empresa, tanto para abastecer de materias primas como de la proximidad a los clientes o distribuidores.
En cuanto se elige la ubicación, es interesante estar informados sobre las políticas en cada ayuntamiento y sobre las normativas que se pueden aplicar en las zonas en las que se quiere comprar el terreno, pues muchas partes pueden llegar a que se condiciones la actividad a desarrollar.
El tamaño del terreno
Hablamos de un factor que debe ser calculado con proyección a futuro. Se deben poder cubrir las necesidades en cuanto a especio y crecimiento, todo ello más allá del periodo de amortización de inversión en los terrenos y a la hora de construir de la nave. Hay que pensar en el espacio necesario que hay actualmente.
Coste estimado de las inversiones
Antes de la compra del terreno, es fundamental que la valoración sea detallada y con la debida fiabilidad del proyecto para construir la nave.
Definir el proyecto
Lo más común es que se encargue el proyecto constructivo de una nave industrial de manera integral a una ingeniería, donde se debe dar toda la información necesaria sobre el tipo de actividad que se quiere realizar y nuestras necesidades en concreto. La empresa se va a encargar de hacer un estudio de carácter geotécnico del terreno, asesorando sobre el tipo de accesos a la nave, tanto para las personas como para el vehículo, así como los cerramientos que más se recomiendan dependiendo de la clase de actividad y los materiales que deban ser almacenados.
Hay que saber que los materiales constructivos son un elemento importante, pudiendo optar por una nave de estructura de hormigón, que sea metálica o la clase de cubierta. En estos últimos casos, es posible optar por la instalación de placas fotovoltaicas para que se pueda realizar un autoconsumo de energía.
En cuanto al diseño interior, debe ser optimizado al máximo de cara a que se favorezca la logística, pues hay que pensar en la ubicación, tanto de las materias primas como de los espacios para el almacenaje, la maquinaria o las vías de acceso para recibir y para expedir las mercancías. En la definición del proyecto se puede aprovechar para poder ir implementando las tecnologías que lleguen a facilitar las distintas tareas y procesos en la actividad industrial.
Podemos también recomendamos, que los proyectos de construcción de naves industriales se hagan con una visión a medio o largo plazo, por lo que va a ser vital que tanto construcción como materiales sean de buena calidad, de tal forma que alarguen la vida útil de la nave y se reduzcan al mínimo las necesidades en materia de conservación o mantenimiento.