La sociedad cambia, a veces, mucho más rápido de lo que nos podemos llegar a pensar. Y muchas veces lo hace gracias a la tecnología, que es la gran culpable de buena parte del desarrollo que se ha ido notando a nuestro alrededor en los últimos años. La tecnología provoca cambios sociales de todo tipo y el que os vamos a comentar en los párrafos que siguen es uno de ellos. Hablamos de algo que se ha convertido en tan común como las lavanderías autoservicio que, más que aparecer, han irrumpido en nuestras calles y plazas de un tiempo a esta parte.
La evolución de la tecnología ha permitido que surjan sistemas de lavandería mucho más eficaces y eficientes, haciendo con ello que muchas personas hayan decidido confiar el lavado de su ropa a este tipo de entidades y provocando un cambio en los hábitos sociales: el de dejar de lavar en casa para pasar a hacerlo fuera. Y lo cierto es que está funcionando este hábito, porque son muchas las personas que han decidido adoptar como propio este tipo de hábito. Aseguran que es más cómodo y que, además, no les resulta en absoluto caro.
Un artículo que se escribió en octubre de 2018 en el portal web de Mundo Franquicia informaba de que las lavanderías autoservicio se habían multiplicado desde que comenzara la crisis, una década atrás. En 2018, no en vano, el número de estos negocios alcanzaba ya las 1.600 unidades, algo que pone de manifiesto el carácter creciente y desarrollista que tenía el sector y que se ha ido manteniendo con el paso de los meses, incluso ahora que vivimos una situación sanitaria que es tan complicada y que ha generado muchos estragos en buena parte de los sectores de los que se compone la economía española.
Otra noticia, publicada esta vez en la página web de Ideal, titulaba con la pregunta de “¿Por qué hay tantas ahora?» refiriéndose al número de lavanderías que han echado a andar en nuestro país. La respuesta es la que comentábamos más arriba: se ha producido un cambio de hábitos en la sociedad. Y ese cambio de hábitos ha venido provocado por un aumento de la confianza y de la comodidad, que es algo que surge como consecuencia de una mejora tecnológica en las lavanderías y que ha convertido a éstas en un instrumento realmente eficaz y eficiente.
Cualquier negocio que se apoye en una mejora tecnológica tiene todas las papeletas para crecer y para convertirse en algo rentable y eficiente. Es lo que deben estar pensando los responsables de las lavanderías en España, un sector que ha crecido como la espuma como consecuencia de una mayor apuesta tecnológica en los sistemas de lavandería y que ha hecho que muchas personas hayan otorgado su confianza a este tipo de negocios. Es así como nos lo han comentado desde Lavatur en función de las experiencias recientes que han venido acumulando.
Una tendencia global
Un negocio como del que venimos hablando era propio de un país como Estados Unidos. De hecho, seguro que habéis visto en más de una película estadounidense alguna escena que se desarrolle en una lavandería. Era solamente por eso por lo que conocíamos la existencia de este tipo de negocios en España. Pero las cosas han cambiado mucho en los últimos años. Solo hace falta echarle un vistazo a nuestro alrededor para darnos cuenta de que lo que veíamos en las películas ya ha llegado hasta nuestro alrededor.
La evolución de estos negocios ha sido meteórica en los últimos tiempos. Llegaron a Europa desembarcando primero en el Reino Unido, algo que nos parece lógico puesto que es ahí donde existe una conexión cultural más grande con el gigante norteamericano. Pero lo cierto es que, ahora mismo, en Alemania, Bélgica, Holanda, Francia, Italia o incluso los países escandinavos se ha convertido en algo habitual confiar en algún tipo de lavandería en lugar de hacer la colada en casa. Nos evita tener que invertir en una lavadora, ganar en espacio en el interior de nuestra vivienda e, en definitiva, también nos hace sentirnos más seguros al contar estos sistemas con la tecnología más punta.
Estamos convencidos de que la tecnología va a seguir dando pasitos para hacer todavía más eficaces estos sistemas de los que hemos venido hablando. Desde luego, lo que está claro es que existe una relación directamente proporcional entre la tecnología y la confianza y la comodidad de la gente. Cuanto mayor es la primera, más aumentan las otras dos. Y este es el secreto de las lavanderías no solo españolas, sino las del resto del mundo. Un negocio que, sin lugar a dudas, tiene un futuro de lo más brillante en los cinco continentes.