Está claro que a los españoles nos va la marcha y que aprovechamos cualquier momento u ocasión para montar una fiesta. Nuestro carácter, que es muy propio del Mediterráneo, así nos lo recomienda. Y es que, en un país como el nuestro, sabemos cómo disfrutar de la vida. La alegría es una característica común a una buena parte de las personas que pueblan este territorio y esa es una de las ventajas que ningún momento de nuestras vidas podemos perder. Somos envidiados en muchas zonas de este mundo precisamente por temas como estos.
Estas alegrías se elevan al máximo exponente cuando llegan algunas fechas marcadas en el calendario en rojo. Hay dos en concreto de las que queremos hablar que no son otras que Halloween y Carnaval. En ambas, en español y la española sacan de su interior la máxima de sus alegrías, lo cual va acompañado de un elemento que nunca puede faltar en contextos como estos. Hablamos, como no podía ser de otra manera, del disfraz, un artilugio que gusta y mucho en el interior de nuestras fronteras y que cada vez goza de una mayor popularidad por derecho propio.
Hace unos días hemos disfrutado de una de esas festividades de las que hablábamos, Halloween, y hemos comprobado que, a pesar del coronavirus, la gente ha seguido adquiriendo su disfraz. Este tipo de actuaciones deja clara esa manera de ser que tenemos en España y que parece que se va a perpetuar en el tiempo. No obstante, sí que hay algo que ha cambiado al respecto de la compraventa de los disfraces: y es que se ha potenciado de una manera increíble el comercio electrónico en lo que tiene que ver con ellos. La mayoría de las personas que se disfrazan prefieren hacerse con sus trajes a través de Internet.
Lo que acabamos de comentar no es algo que nosotros nos habíamos sacado de la manga: es algo de lo que ya se han hecho eco multitud de expertos en el sector. La página web de la agencia Kuombo asegura que este crecimiento es real y evidente y que, además, va a seguir siendo habitual de cara a los próximos años. Además, el artículo asegura que, gracias al aumento de facilidades que proporciona Internet en lo que tiene que ver con la compra de disfraces, se ha terminado en buena medida con uno de los problemas más importantes del sector: la estacionalidad. Y es que, siendo más fácil hacerse con un disfraz, la gente ya los suele comprar incluso para los cumpleaños.
Una noticia que fue publicada en el portal web Agencias de Comunicación informaba de que había crecido un 27% la venta de disfraces en 2015 con respecto al año anterior. No cabe la menor duda de que este es un hecho que pone de manifiesto ese aumento de la confianza que tiene la gente en lo que respecta a Internet y todos sus sistemas y procesos. Es imprescindible que la tendencia se mantenga con el fin de hacer más cómoda la compra de disfraces, algo que ya se ha demostrado que le viene bien al sector para hacer de sus empresas negocios rentables.
En los últimos años, son cada vez más las personas que deciden adquirir un disfraz para cualquier tipo de celebración y que buscan en Internet su traje perfecto. Esa es la manera elegida por muchos y muchas de cara a obtener un traje que se ajuste a su bolsillo y que cumpla con sus expectativas. En La Casa de los Disfraces también apuntan que el ahorro de tiempo que supone la compra online es otro de los motivos por los cuales mucha gente se ha animado a adquirir un disfraz. Desde luego, a nadie le cabe la menor duda de que Internet, para este y otros sectores, ha significado progreso y rentabilidad.
Una necesidad para cada vez más gente
Vivimos en una sociedad en la que precisamente lo que no sobra es tiempo. Ese es uno de los secretos que acompañan a la buena salud del comercio electrónico y no solo en España, si no también en el resto del planeta. Por tanto, de todo eso se puede deducir que es necesario para mucha gente disponer de Internet para continuar con sus habituales procesos de compra. Desde luego, si la sociedad quiere avanzar, estamos seguros de que tiene que echar mano de un avance tecnológico como lo es la red.
Hemos hablado de solo uno de los sectores que han encontrado un aumento de potencia gracias a la red. Pero lo cierto es que son muchos más los negocios y las actividades que han visto en este elemento una bendición. Hay quien apunta, cargado de razones, que Internet es una de las claves que hemos seguido para salir de la crisis del 2008 y que será una de las llaves para salir también de la crisis económica provocada por el coronavirus. Estamos convencidos de que así será.